martes, 25 de marzo de 2014

Por los cortados de Rivas

En esta ocasión hemos tenido la oportunidad de conocer una zona cercana y muy bonita para la actividad de la bicileta de montaña. Se trata de los cortados de Rivas-Vaciamadrid, un paraje lleno de pistas y senderos, por el que discurre el río Manzanares, y que es visitado por multitud de aficionados a las dos ruedas. La ruta elegida para este primer domingo de primavera tan frío, nos ha llevado desde Getafe (La casa de adri más concretamente), hasta esta zona del municipio ripense, mezclando tramos de pistas con otros de carril bici, y algún otro de sendero.


Pista Junto Al Río
La jornada comenzaba a las 8:15 de la mañana cambiando la maltrecha cadena de la Bici de Adri (los años no perdonan amigo), y que nos llevó más tiempo del esperado. A eso de las 9:00, tras una dura pelea con los desobedientes eslabones, conseguimos doblegarla y que se coloque por fin en su sitio, lo que nos permite comenzar a dar pedales, y de paso, entrar un poco en calor.

Raudos y veloces, gracias a un terreno muy favorable, alcanzamos velocidades de vértigo rondando alrededor de los 35 km/h. Incluso con el viento de cara, nuestras piernas mueven la “burra” con gran facilidad. Con este buen ritmo pronto nos plantamos en el carril bici que une Getafe con Perales del Rio buscando la salida hacia la pista de tierra que pasa por encima tanto de la M-50 como la línea del Ave. En la pista el ritmo baja no por nuestras piernas sino por el mal estado del terreno, muy bacheado, que impide rodar cómodo, aunque aún con terreno favorable, seguimos con buena marcha buscando la senda que circula junto al rio.

Trialera de Vuelta a Casa
Durante esos kilómetros bacheados la cadena de Adri nos da algún susto pero una Orbea es una Orbea y no nos defrauda permitiendonos seguir el camino ya junto al rio. Ahora el sol brilla con fuerza y aunque el aire frio nos obliga a seguir abrigados, la  mañana está siendo magnifica y, se nota en el ambiente, ya que en cada metro nos cruzamos con grupos de aficionados a este bello deporte. 
  
Llegamos a Rivas y giramos a la izquierda en busca del camino de vuelta por una “trialera” (Camino estrecho y muy técnico en el que acabas besando el suelo) entre arboles aun sin vestir pero, aun así, el paisaje hermoso nos motiva para seguir hacia adelante. Si hasta ahora nos habíamos cruzado con algunos ciclistas ahora el transito aumentaba y en ese fino sendero el riego de besar la tierra era continuo. Algún charquito de aguas turbias nos hacía poner pie a tierra pero sin problemas, aparecemos en tierra firma bien asfaltada por el hombre y en unas pocas pedaladas aparecemos en el carril bici que une San Martin de la Vega con Perales.

Carril Bici Getafe - Perales
Nuestro camino de tierra se convierte en carril bici y asfalto ya en dirección a casa y con un buen sabor de boca tras una gran mañana de ciclismo. El regreso directo a casa se hace algo más duro de lo esperado ya que el aire ha girado y golpea con fuerza en nuestros rotros.  Las piernas, aun fuertes, y nuestra cabeza, extra-motivada, nos animan a subir el Cerro Buenavista. Una “tachuela” de kilómetro y medio pero que sumado al desgaste de todo el día nos hace sufrir un poco más de lo esperado.

Al poner pié a tierra, a eso de las 11:00, el cuentakilómetros nos marca 43 km. Distancia corta, debido a que se van notando los entrenos, pero que sirve para ir sumando y progresando.


1 comentario:

  1. No hay entreno malo, cada kilometro cuenta. Ánimo, seguir así pronto me uniré a vosotros en un entreno...

    ResponderEliminar